Saludos a todos!
Tengo varios días sin escribir, pero eso no quiere decir que no haya vivido cosas emocionantes ni reflexionado sobre cosas importantes de mi vida. Intentaré ponerme al día poco a poco con estas cosas.
Por ahora quería comentarles una reflexión que tuve hoy mientras estaba en misa, y que luego de recibir un mail de mi amigo jesuita JOsé me decidí a escribirlo aquí en mi blog.
Yo soy de los primeros que borraba cualquier mail que me llegaba sobre algún tema religioso porque me parecía "pavoso" o demasiado fanático para mi gusto. Sin embargo, luego de haber pasado por momentos tan difíciles siento que el espíritu lleno es lo único que me da paz, y este espíritu lo lleno a través de Dios. Por este motivo, este post va dirigido especialmente para aquellos que, bien por alguna situación difícil, o porque sencillamente son creyentes católicos de toda la vida, sienten que pueden llenar su espíritu a través de Dios o de cualquier otra fuerza superior que exista.
"Este espíritu lleno lo siento en el pecho, como una fuerza infinita que se concentra en mi corazón y que, en su momento de máxima expresión, se expande radialmente por todas mis extremidades... y me da paz"
Para los que fueron hoy Domingo a misa deben haber escuchado en el evangelio la parábola de los talentos. Para los que no fueron, pueden leerla en el siguiente link:
http://es.catholic.net/aprendeaorar/103/117/articulo.php?id=4151
A continuación les comparto el mail que le escribí a JOsé como respuesta a un mail que nos mandó a un grupo de amigos con respecto a esta parábola.
"Hola JOsé,
Gracias por compartir tan bonita reflexión. El evangelio de hoy es uno de los pocos que quedaron grabados en mi memoria de la educación católica que recibí. La única diferencia es que siempre trabajaba mis talentos y los multiplicaba para MI, para mi familia o para las personas que me rodean. Hoy durante la misa por primera vez caí en cuenta que el primer motivo por el cual quiero multiplicar mis talentos es, en primer lugar, para Dios, para agradecer y retribuirle todo aquello que me ha dado. Además, la parábola menciona que Dios nos da los talentos en la medida que somos capaces de aprovecharlos, y creo que una forma de hacer esto es lograr salir adelante a pesar de los problemas que se nos presenten en el camino. Desde el día de la muerte de mi hermano mucha gente me dijo que Dios no pone sobre nuestros hombros ninguna carga que no podamos llevar, así que aquí voy yo, saliendo adelante con un peso enorme en el corazón, con sudor del alma y algunas lágrimas en mis ojos, pero con la esperanza de contar con la presencia espiritual de Dios y de mi hermano por siempre.
Por último, uno de mis lemas de vida es Carpe Diem, y me agrada verlo al final del texto que nos enviaste, como conclusión de una de las parábolas más significativas en mi vida. Muchas gracias por estos detalles que sabes hacer que lleguen en los momentos que más los necesito...
David"
